La Santísima Trinidad es el dogma fundamental del cristianismo. Consiste en la creencia de que Dios es uno y trino, es decir, es una unidad conformada por tres personas divinas relacionadas entre sí: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

El catecismo de la Iglesia Católica lo define de la siguiente manera:

La Trinidad es una. No confesamos tres dioses sino un solo Dios en tres personas: «la Trinidad consubstancial»… Las personas divinas no se reparten la única divinidad, sino que cada una de ellas es enteramente Dios: «El Padre es lo mismo que es el Hijo, el Hijo lo mismo que es el Padre, el Padre y el Hijo lo mismo que el Espíritu Santo, es decir, un solo Dios por naturaleza».

Dios Padre es el creador de la vida en todas sus formas y manifestaciones. Jesús es el Hijo único de Dios, quien procede de su misma naturaleza y acepta encarnarse en la Humanidad para dar cumplimiento a los designios del Padre. Por último, el Espíritu Santo, que proviene de ambos, es el que infunde la vida e inspira acciones y palabras de bien en los corazones.

En el Evangelio de San Juan podemos leer:

“Y Jesús les dijo: Les doy un mandamiento nuevo: que se amen unos a otros como yo los he amado. Así reconocerán que son mis discípulos: si se tienen amor unos a otros…

Si ustedes me aman guardarán mis mandamientos y yo rogaré al Padre y les dará un Intercesor que permanecerá siempre con ustedes.  Éste es el Espíritu de Verdad. No los dejaré huérfanos…El Espíritu Santo que el Padre enviará en mi Nombre, les va a enseñar todas las cosas y les recordará todas mis palabras.

 Palabra de Dios

 

Como parte de la Familia Trinitaria, adoramos y veneramos a la Santísima Trinidad, el mismo Dios y especialmente este Domingo 7 de Junio, donde celebramos su día

Que Dios Trinidad, PADRE , HIJO Y ESPÍRITU SANTO, nos guíe en nuestro andar, en estos tiempos complicados que estamos atravesando.

Jesús promete que no nos dejará solos, que no nos abandonará. Confiar en Él es la respuesta, abandonarnos en sus manos, pero con fe certera de que lo que promete, lo cumple.

Que en sus brazos de amor estemos en Paz y Felices.

Feliz Día de la Santísima Trinidad!!!!!

GLORIA AL PADRE, GLORIA AL HIJO Y GLORIA AL ESPÍRITU SANTO, COMO ERA EN UN PRINCIPIO, AHORA Y SIEMPRE, POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS. AMÉN

TRISAGIO EN HONOR A LA SANTÍSMA TRINIDAD. 

Es una de las más hermosas oraciones en honor de la Santísima Trinidad; una serie de invocaciones y alabanzas, entresacadas de la Sagrada Escritura y de la Liturgia, que abren el corazón a la adoración, a la gratitud y al amor a las tres divinas Personas; un eco solemne del “Santo – Santo – Santo” que cantan en el cielo los ángeles y los santos, llena el universo y encuentra gozosa resonancia en el corazón del hombre; un canto de alabanza único e ininterrumpido a la Santa Trinidad”.

Primera Parte:

Dios mío, ven en mi auxilio.
Señor, date prisa en socorrerme.
Gloria al padre, y al Hijo, y al Espiíritu Santo.
Como era en principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén

Primera Oración:

Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal
Ten piedad de nosotros

Padre Nuestro…

A ti sea la alabanza, a ti la gloria, a ti la acción de gracias por los siglos de los siglos, oh Beatísima Trinidad.

Santo, Santo, Santo es el Señor Dios del universo,

llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.

(Las dos invocaciones precedentes se repiten nueve veces)

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

Como era en principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglo.

Amén.

(La segunda y la tercera parte, como la primera, comenzando desde: Santo Dios, Santo Fuerte…)

ANTÍFONA: Benedita sea, ahora y por siempre, y por todos los siglos, la Santa y única Trinidad, que ha creado y gobierna todas las cosas.

Bendigamos al Padre y al Hijo con el Espíritu Santo.

Ensalcémoslo por los siglos.

OREMOS:

Dios, Padre todopoderoso, que has enviado al mundo la Palabra de la verdad y el Espíritu de santificación para revelar a los hombres tu admirable misterio, concédenos profesar la fe verdadera, conocer la gloria de la eterna Trinidad y adorar su Unidad todopoderosa.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Conclusión: En ti creo, en ti espero, te amo, te adoro, oh Beatísima Trinidad.

Antífona final: Te saludamos, María, Hija de Dios Padre, Madre de Dios Hijo, Esposa del Espíritu Santo, sagrario de la Santísima Trinidad.